Pongamos que hablo de Madrid.

Cerro Tío Pío, Madrid.

"Allá donde se cruzan los caminos,

donde el mar no se puede concebir,

donde regresa siempre el fugitivo,

pongamos que hablo de Madrid.

Los pájaros visitan al psiquiatra,

las estrellas se olvidan de salir,

la muerte pasa en ambulancias blancas,

pongamos que hablo de Madrid"

Iso 100, f/5.6, 2sg.

Y es que vivir en Madrid es algo que no te deja indiferente.

Te genera una especie de amor-odio constantemente. Tan pronto te estas quejando por atascos, contaminación, prisas, mucha gente... cómo tan pronto estas disfrutando de sus edificios, sus infraestructuras y su cultura...

Una de estas cosas de las que puedes disfrutar en Madrid son las puestas de sol. Parece que lo ideal es disfrutarlas en montañas o playas, pero sin duda un atardecer en el Cerro del Tío Pío no tiene nada que envidiar a estos sitios. Con unas vistas alucinantes de Madrid, donde puedes ver el mar de edificios y las montañas de Torres.

Y después disfrutar de como poco a poco, la ciudad se va encendiendo e iluminando la noche.